C.D.

Puede que tenga un Te amo al filo de la lengua.
Es posible que eso sea y quiero sacarlo.
Podría decirlo esta noche, mientras andamos por calles empedradas;
puede que lo saque mientras te observo tomar café viendo hacia la plaza.
Es un Te amo necio pegado a mi lengua.
No sé si quitarlo con los dedos o escupirlo al aire,
me da miedo que te caiga y te de miedo.
Sí, es un Te Amo.
Una partícula diminuta y ácida que empiezo a degustar.

Comentarios

la nada de nada dijo…
avienta el te amo, lo que haga a quien le caiga ya es cosa suya. sun súper abrazo. gracias por el felíz año, uno mejor para tí, lleno de cosas que merezcan y sepan recibir esos te amos. marianna

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