Iba a hacer un recuento de un año pesado. De otra operación en febrero, del miedo y el enfrentamiento con la realidad. Iba a decir por ejemplo, que en junio se me acabó la falacia y que en agosto me entusiasmé pero que pasando mi cumpleaños construyeron un acordeón de papel con mi corazón. Que en septiembre lloré más por mi hermana que por la telenovela de Frida Sofía y que no me dieron dos o tres apoyos que pedí. Que en noviembre encontré la magia y que en diciembre la perdí, y que lo poco o mucho que hago pone en evidencia a varios y les importa poco a muchos, pero no quiero ese tipo de recuento. Vamos con toda actitud 2018, este año fue difícil hasta para el país pero el que sigue seremos más audaces, seguiré haciendo porque el que no se mueve está muerto. Viajé, conocí lugares y personas, disfruté, bailé, aprendí.
No logré todo eso que quería pero sí lo otro que busqué así que bien, seré más tenaz, brillaré aún más, protegeré lo que me cobija y agradeceré lo que está.
Es un hecho, hay que aprovechar nuestros medios para conseguir nuestros fines! Vamos 2018!

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Guardiana del abismo

El retrato de Zoe y otras mentiras, de Salvador Elizondo

G. V. Z.