Sin ninguna pretensión


Estoy fresca como una lechuga. Apenas retomando el paso en mi pequeña ciudad atestada. La cerveza Sol es horrible, pero sirve lo mismo para emborracharse (lo malo ocurre cuando tu estómago se ha desacostumbrado debido a 20 días de abstinencia...)
Italia es bella. El viaje estuvo cansado pero valió la pena. ¡Visitar 11 ciudades cuando estaban planeadas solamente cuatro! ... anduvimos como locos.
Me llené los ojos con una maravillosa Florencia, con el Davide y el nacimiento de Venus. Me cansé visitando la grandeza del Phanteon, el Coliseo y del Foro romano. Me senté a tomar vino en Venezia, con una vista formidable del campanario de plaza San Marcos...
Estuve tan a gusto en las pequeñas calles de San Gimigniano.
Saboreé los deliciosos gnocchi y los tortelini.
Me recreé la vista (en Florencia hasta los conductores de trasporte colectivo son guapos, en Torino, hasta los polis lo son... vaya).
Por otra parte, me asombré al darme cuenta de que, durante el vuelo México- Madrid, había dos encerrados en el baño. Creí que eso sucedía sólo en las películas... jeje.
Me enojé y luego me reí por que a uno de mis compañeros de viaje no lo dejaban entrar a territorio español por tener nombre y apariencia medio árabe... Es comprensible, los españoles andan con los pelos de punta y no es para menos: José María Aznar y su apoyo a Bush en su guerrita inventada, lo ocurrido en Atocha, la ETA...

Tuve paciencia... al menos eso intenté, porque eso de viajar en grupo no es fácil...

Comentarios

Bienvenida guapa! anda, a escribir.
Besos.
Unknown dijo…
Qué bueno que estés de regreso! Me da gusto leerte, así que esperaré con ansias tu próximo post.

Ah sí... una que otra foto no caería mal :P

Saludos.

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