A punto de empezar
Dentro de los hechos relevantes de este año está el 14 de febrero. Ese día tuve una excelente celebración de día del amor, hubo rosas, cena y un libro recién publicado. En mayo, por recomendación de mi doctora de cabecera, me quitaron una estorbosa glándula accesoria... Lo mejor de eso fue el trip que me aventé con la anestesia, la bienvenida con flores y reposar oyendo cuentos muy buenos como uno de Rascón Banda. En octubre, después de mi cumpleaños, lo mejor fue que alguien regresó conmigo e hizo que el fin de año valiera mucho la pena. En cuanto a los ratos un tanto difíciles, estuvo mi visita al infiernillo, un episodio doloroso de sonambulismo, la pérdida (cuando fui a pedir chamba) de una pulsera que me regaló mi papá. En septiembre, un desmoronamiento intenso que me provocó anemia y que me sintiera verdaderamente mal. Y en noviembre, un incidente con una mujer de goma; de esos seres que atraviesan las calles a la mitad y en diagonal, de aquellas personas que cruzan sin ver el se...